sábado, 27 de junio de 2015

Extravagantes datos de la mantis marina





Mantis Marina

Odontodactylus scyllarus
Nombres: Mantis marina, langosta mantis, gamba mantis o langosta boxeadora.

Localización: El océano Indo-Pacifico, al sur de Japón, al norte de Australia y entre el este de África y Guam.

Hábitat: A una profundidad entre 3 a 40 metros, viven en madrigueras entre los corales.

Descripción: Es un crustáceo de la familia de los estomatópodos. Mide entre 3 a 18 centímetros de largo. Se destaca por sus llamativos patrones de colores y fluorescencia.




Se han descrito cerca de 400 especies de mantis marinas y todas las especies vivas pertenecen al suborden Unipeltata.5

Según el tipo de garra, que es usada como arma de ataque y caza se distinguen dos grupos:

Perforadoras: están armadas con apéndices espinosos rematados con puntas de púas, utilizados para apuñalar y enganchar a las presas.



Trituradoras: tienen un brazo desarrollado como garrote y una púa rudimentaria (que sin embargo es fuerte y se utiliza en las luchas entre ejemplares de la propia clase). El brazo se utiliza para apalear y aplastar a las presas. La parte interna del dáctilo (la porción terminal) puede poseer un borde afilado, con el que puede cortar la presa mientras nada.

Ambos tipos golpean rápidamente y agitando sus garras rapaces en la presa son capaces de infligir daños graves en víctimas significativamente mayores en tamaño que ellos. Las trituradoras emplean estas armas con rapidez cegadora, con una aceleración de 10.400G (102.000 m/s2, o 335.000 pies/s2) y una velocidad de 23 m/s sin tener que trasladarse,6equivalente a la aceleración alcanzada por un proyectil calibre 22.7 8 Debido a la rapidez del golpe se generan burbujas de cavitación entre el brazo y la superficie golpeada.6 El colapso de estas burbujas de cavitación produce fuerzas sobre su presa adicionales a las del golpe mismo, de 1.500 newton, lo cual significa que la presa es doblemente golpeada.9 Aunque el golpe inicial falle, la onda de choque resultante puede ser suficiente para aturdir o hasta matar a las presas.

El golpe también causa sonoluminiscencia a partir del colapso de la burbuja. Esto produce durante un intervalo tremendamente corto una cantidad muy pequeña de luz y una temperatura de miles de grados dentro de la burbuja que colapsa. En estas condiciones los átomos se ionizan y los electrones pasan a formar un plasma que emite luz. Sin embargo las temperaturas se alcanzan en puntos muy localizados y se disipan casi al instante. Tanto la luz como la subida de la temperatura son demasiado débiles y de corta duración para ser detectados sin necesidad de equipos científicos avanzados. La emisión de luz y aumento de la temperatura probablemente no tienen importancia biológica, sino que son meros efectos secundarios del golpe, producto de la cavitación (los crustáceos de la familia Alpheidae producen un efecto similar).

Las trituradoras usan su habilidad para atacar a caracoles, moluscos, cangrejos, y ostras de las rocas; sus brazos contundentes les permiten romper los caparazones de sus presas en pedazos. Las perforadoras, en cambio, prefieren animales de carne más suave, como peces, que con sus garras puntiagudos son fácilmente arponeables.


CARACTERÍSTICAS:
Este abundante aunque poco conocido crustáceo posee características increíbles que lo hacen único. Esas características son:



OJOS:



Posee los ojos más avanzados del planeta ya que posee 12 foto
receptores, a diferencia de la mayoría de los animales que poseen entre 2 a 4, con algunas excepciones. Esto le permite a la mantis marina ver desde la luz infra roja hasta la luz ultra violeta, así también la luz polarizada y colores que los humanos no podríamos ni imaginar. Además sus ojos son capaces de moverse de manera independiente y girar hasta 300°, por lo que crean un campo visual enorme.

Mecanismo de caza: La mantis marina es capaz de propinar el golpe más poderoso del reino animal. Este crustáceo emplea sus garras con una aceleración extraordinaria lo que genera una fuerza de hasta 1500N, con esto destroza los caparazones de sus presas. Además del golpe letal, genera una burbuja de aire debido a la velocidad del ataque. Estas se conocen como burbujas de cavitación y generan una onda expansiva que aturde a sus enemigos, además de generar altas temperaturas en un instante.

Armadura: Este animal está equipado con un caparazón capaz de resistir los golpes anteriormente mencionados sin sufrir daños. La estructura de su puño tiene una dureza superior a la de cualquier material sintético compuesto. Esto se debe a que está compuesto por hidroxiapatita un mineral poco soluble que también se encuentra en el esmalte de nuestros dientes, además bajo la capa exterior de hidroxiapatita tiene barras de quitosano dispuestas en direcciones diferentes para desviar las fracturas y aumentar la resistencia.

Los ojos de la mantis marina son organismos únicos con capacidades extraordinarias que los hacen los más complejos del mundo. Estos poseen una alta movilidad (macanico y estructural) y además 16 tipos de foto receptores distintos (quimico y fisico).

Por un lado sus dos ojos se mueven de manera independiente el uno del otro y son capaces de moverse en 300° lo que le proporciona un campo visual amplio.
Por otro lado cada uno está compuesto por más de 10000 omatidios (unidades sensoriales compuestas de células foto receptoras, una cornea y un axón, principalmente). Sus ojos están divididos en tres secciones, con diferentes especialidades, esto le proporciona visión trinocular con la que pueden observar a un objeto de tres formas distintas. Las secciones superior e inferior se especializan en la forma y el movimiento. Estas secciones están divididas por seis filas paralelas de omatidios, que se encargan de la visión en color abarcando un espectro de luz mayor al de los humanos, este va desde la luz infra roja hasta la ultra violeta, además de la luz polarizada. La mantis marina es capaz de tener esa visión debido a sus foto receptores especializados, en la zona central existen doce tipos distintos. A pesar de poder ver una gama de colores inmensa no son capaces de distinguirlos con precisión, eso sí pueden distinguir los primarios de manera más veloz y con menos gasto de energía que los humanos.
Además de su asombrosa visión las langostas boxeadoras se caracterizan por tener un método de ataque poderoso e ingenioso (mecanico), ellas utilizan sus apéndices de los extremos de dos maneras distintas, pueden usarlas como mazos para propinar golpes o como arpones para atravesar a sus presas. Los golpes de la mantis alcanzan velocidades de 23m/s y alcanzan fuerzas de hasta 1500N. Son tan poderosos y veloces que descomprimen el agua generando burbujas de cavitación, esta son burbujas de aire que llegan a altas temperaturas y producen luz y un fuerte sonido por una milésima de segundo. Estas burbujas colapsan y generan un segundo impacto de unos 500N de fuerza. Estos dos impactos son suficientes para destruir el caparazón de otros crustáceos. La mantis marina utiliza un mecanismo de almacenamiento de energía elástica en su apendice que amplifica la energia generada por el musculo para luego liberarla con una aceleración comparable al de una bala. 

Este mecanismo le permite generar 470.000 watts de poder por kilogramo de musculo. El poderoso golpe de la mantis marina no tendría utilidad si no fuera por la resistente estructura que tiene en su apéndice (estructural). Es tan duro que resiste los numerosos impactos que efectúa sin resquebrajarse. El mazo que tiene al extremo de su apéndice (la parte que recibe el impacto) está compuesto por tres partes con propiedades y composiciones diferentes. La parte externa llamada parte de impacto consta de una delgada capa con alta densidad de hidroxiapatita.

La siguiente región llamada periódica está hecha de barras de quitosano, un compuesto orgánico, estas barras forman una hélice helicoidal puestas en distintas direcciones. Gracias a esto la energía de los impactos de dispersa para
no generar rajaduras. La tercera parte llamada estriada proporciona una protección extra contra las rajaduras.






Las características ya mencionadas aplicadas a los hombres podrían ser de gran utilidad, las posibles situaciones en que podrían usarse cada una de las características son:
El principio de la visión de la mantis marina podría aplicarse en telescopios o binoculares, así podríamos ver una gama de luz mucho mayor a la que vemos normalmente, esto nos serviría ya que sabríamos de manera inmediata cómo reaccionan los objetos y si es que emiten distintos tipos de rayos. Sería de gran ayuda en telescopios ya que se verían los planetas con mayor exactitud de colores y los procesos que llevan a cabo con la luz. Los principios están ennegrecidos.

Su mecanismo de caza podría ser imitado por los bomberos, por los rescatistas o investigadores submarinos y por pescadores o buzos. Por una parte por los bomberos porque lo podrían usar para derrumbar puertas ya que despliega una gran cantidad de energía que facilitaría la labor de tumbar puertas en incendios o en algún rescate. Por otra parte los rescatistas o investigadores submarinos lo podrían utilizar también para derribar o romper estructuras bajo el mar, en este medio sería aún más eficiente ya que podría generar burbujas de cavitación que proporcionaría una fuerza extra. Finalmente los pescadores o buzos lo pueden usar para noquear a los peces bajo el agua con un golpe bajo el agua y amplificando la energía, el pez quedaría inconsciente.
La dureza de su mazo podría ser imitada con muchas utilidades, entre ellas están, la creación de lozas de alta resistencia, protección para objetos contra grandes impactos (por ejemplo una carcasa de celular) y también podría ser utilizada para crear armaduras para los soldados. Todas estas aplicaciones se deben a que la dureza del mazo de la mantis marina es una de las mayores encontradas, además de poseer un grosor considerablemente pequeño, lo que la hace aún más útil, ya que el material que se podría crear siguiendo la estructura del caparazón seria resistente y al mismo tiempo liviano.